Confesión

Para confesarse bien

El corazón de la confesión no son los pecados que decimos, sino el amor divino que recibimos y que siempre necesitamos. (PAPA FRANCISCO)

5 PASOS PARA HACER UNA BUENA CONFESIÓN

Algunos consejos sencillos para cuando vas a confesarte

  • 1. EXAMEN DE CONCIENCIA

    Ponernos ante Dios que nos ama y quiere ayudarnos. Analizar nuestra vida y abrir nuestro corazón sin engaños.

  • 2. DOLOR DE LOS PECADOS

    Sentir un dolor verdadero por haber pecado ya que hemos lastimado a quien más nos quiere: Dios.

  • 3. PROPÓSITO DE LA ENMIENDA

    Si verdaderamente amo a Dios, no puedo seguir lastimando al Amado. De nada sirve confesarnos si no queremos mejorar. Podemos caer de nuevo por debilidad, pero lo importante es la lucha, no la caída.

  • 4. DECIR LOS PECADOS AL CONFESOR

    El sacerdote es un instrumento de Dios. Dejemos a un lado la "vergüenza" o el "orgullo" y abramos nuestra alma seguros de que es Dios quien nos escucha. Procura seguir la regla de las tres “ces”: Corto (sin enrollarte), claro (sin ambigüedades) y completo (sin callar ningún pecado)

  • 5. CUMPLIR LA PENITENCIA

    La penitencia es una oración o un acto sencillo que representa nuestra reparación por las faltas que cometimos.

CONSEJOS PARA LA CONFESIÓN

Algunos consejos sencillos para cuando vas a confesarte

  • 1. Antes de la confesión

    Lo primero es prepararla bien. ¿Te gusta que el altar esté bonito, los manteles limpios, la Iglesia preparada? Pues lo mismo con la confesión. No la desprecies confesándote cuando te apetece y acudiendo sin preparar.


    Prepárala haciendo a conciencia el examen de conciencia.


    Tienes dos exámenes de conciencia en esta misma web.

  • 2. Al comenzar

    Cuando entres utiliza el saludo inicial establecido


    - Ave María purísima. 


    En algunos países se suele decir


    - Padre, perdóneme porque he pecado. 


    También vale. 


    Y después dices cuánto tiempo hace que no te confiesas. No digas "mucho, poco, regular" eso es muy relativo.

  • 3. Cuando estás diciendo tus pecados

    Al confesar acuérdate de la "regla de las 3 ces". La confesión tiene que ser


    - CORTA: Sin en rollarte. Sin justificarte. Sin echar la culpa a otros. 

    - CLARA: Diciendo sin eufemismos lo que has hecho, y mejor si dices las veces. 

    - COMPLETA: Diciendo todo sin callar ninguno.

  • 4. De qué me tengo que confesar

    Importante: Lo que me pasa no es pecado, lo que siento, no es pecado. El pecado es lo q hago, lo concreto, lo específico y controlable: Pensamiento, palabra, obra y y omisión.


    "Pereza" no es pecado. Quedarme en la cama puede serlo. 

    "Egoísmo" no es pecado. No ayudar a otro sí lo es.

    "Rencor" no es pecado. Hablar mal de alguien por que le tienes manía sí lo es.


    ¿lo entiendes?


    Aquí tienes dos exámenes de conciencia para que pienses mejor tus pecados


    EXAMEN DE CONCIENCIA BÁSICO


    EXAMEN DE CONCIENCIA AVANZADO

  • 5. Cuando acabas de confesarte

    A veces te pueden preguntar alguna cosilla en la confesión. 


    Se hace siempre de buena fe para poder aconsejar mejor o entender o completar lo confesado. 


    Si tienes dudas, si quieres preguntar o dirección espiritual quizá es mejor esperar a después de la confesión. Es más ordenado.


    Escucha los consejos. Algunos penitentes añaden una frase antes de la absolución: "Jesús, hijo de Dios, apiádate de mi, que soy un pecador"

  • 6. Cuando terminas

    Recibe la absolución con piedad, como haces con la comunión y cumple la penitencia enseguida que si no se te olvida. 


    No olvides tampoco de agradecerle a Dios el inmenso regalo de su perdón y de la gracia que te concede en el sacramento para su santificación. 

EXAMEN DE CONCIENCIA

Se trata de examinar nuestra conciencia a partir de nuestra última confesión. El fin del examen no es angustiarse con las culpas sino reconocerlas con seriedad y confianza en Dios para confesarlas sabiendo que seremos perdonados. 

  • Examen para niños

    1) ¿He dejado de rezar mis oraciones a Dios, a la Virgen o al Angel de la guarda?


    2) ¿He faltado a Misa los domingos por flojera?


    3) ¿Me he portado mal en la Iglesia o he hablado con otros niños?


    4) ¿He faltado al respeto y cariño hacia familiares y profesores?


    5) ¿He desobedecido a mis padres o les he faltado al respeto de palabra o con el pensamiento?


    6) ¿Peleo frecuentemente con mis hermanos o amigos?


    7) ¿He dejado de ayudar en casa, o he sido desordenado con las cosas materiales?


    8) ¿He comido más de lo necesario? ¿Me he dejado llevar por caprichos?


    9) ¿He gastado en cosas innecesarias o no devuelvo el dinero que me sobra de los que me dejan?


    10) ¿No he dado limosna en la Iglesia o a gente necesitada?


    11) ¿He visto o hecho cosas inconvenientes que no haría delante de mis padres?


    12) ¿Dedico mucho tiempo a la televisión o a los juegos sin estudiar o hacer los deberes?


    13) ¿He robado cosas a mis compañeros o en las tiendas?


    14) ¿He dicho mentiras a mis padres, profesores o amigos?


    15) ¿He tenido envidia? ¿He sido orgulloso? ¿He despreciado a otros niños creyéndome más que ellos?


    16) ¿He hecho los deberes mal, sin prestar atención, sin esforzarme? ¿Me he olvidado de ofrecerle a Dios mis estudios? ¿He dejado de luchar por sacar buenas calificaciones?


    17) ¿He jugado con cosas supersticiosas?


    18) ¿He comulgado a sabiendo que tenía algún pecado mortal?


    19) ¿Me he negado a pedir perdón cuando lo he hecho mal?¿Me he negado a perdonar a otros?


    20) ¿He dado mal ejemplo a los demás?


    21) ¿He sido injusto o tramposo en los deportes y juegos en casa o en el colegio?


    22) ¿He maltratado as cosas que no eran mías?


    23) ¿He sido egoísta y me he negado a compartir mis cosas?

  • Examen para jóvenes

    • ¿Cuando fue mi última Confesión? ¿Me he acercado estando en pecado grave o mortal a recibir la Comunión? ¿He callado por vergüenza algún pecado mortal en mis confesiones anteriores?


    • ¿He dudado o negado las verdades de la fe católica? ¿He puesto en peligro mi fe leyendo libros o revistas contrarias a la fe católica o he asistido a reuniones de sectas que no son católicas? ¿He sido supersticioso o practicado el espiritismo


    • ¿He tomado el nombre de Dios en vano? ¿He blasfemado? ¿He jurado sin necesidad o sin verdad?


    • ¿He faltado a Misa los domingos o días festivos por mi culpa y sin una razón grave? ¿He cumplido los días de ayuno y abstinencia?


    • ¿He desobedecido a mis padres o superiores en materias de importancia? ¿Les he mentido u ocultado la verdad?


    • ¿Tengo enemistad, odio o rencor contra alguien? ¿Rehuso perdonarle? ¿He causado daño a alguien? ¿Me he embriagado, bebido con exceso o tomado drogas? ¿He practicado, aconsejado o facilitado el grave crimen del aborto?


    • ¿He aceptado pensamientos o miradas impuras? ¿He visto películas inmorales? ¿He tenido conversaciones vulgares o impuras? ¿He realizado actos impuros? ¿Solo o con otra persona? ¿He tomado píldoras anticonceptivas o preservativos?


    • ¿He tomado dinero o cosas que no son mías? ¿Cuánto? ¿He restituido o reparado por el daño causado? ¿He sido honrado en mis negocios?


    • ¿He dicho mentiras? ¿He calumniado o descubierto, sin causa justa, defectos graves de otra persona, aunque sean ciertos, pero no conocidos? ¿He hecho juicios temerarios contra el prójimo? ¿He reparado el daño que haya podido seguirse?

  • Examen para novios

    1) ¿Es firme mi fe en Dios? ¿Me adhiero firmemente a la doctrina de la Iglesia? ¿Tengo interés en mi formación cristiana escuchando la Palabra de Dios, evitando cuanto pudiera dañar mi fe? ¿He manifestado mi condición de cristiano en la vida pública y privada?


    2) ¿He rezado por la mañana y por la noche? ¿Mi oración es una auténtica conversación —de mente y corazón— con Dios o un puro rito exterior? ¿He ofrecido a Dios mis trabajos, dolores y gozos?


    3) ¿Tengo reverencia y amor hacia el nombre de Dios o le ofendo con blasfemia, falsos juramentos o usando su nombre en vano?


    4) ¿Guardo los domingos y días de fiesta de la Iglesia participando activa, atenta y piadosamente en la Santa Misa? ¿He cumplido el precepto anual de la confesión?


    5) ¿He contribuido, en el seno de mi familia, al bien y a la alegría de los demás con mi paciencia y verdadero amor? ¿He sido respetuoso con mis padres, prestándoles atención y ayuda en sus necesidades?


    6) ¿Defiendo en lo que puedo a los marginados, estoy junto a los débiles o, por el contrario, he despreciado a mis prójimos, sobre todo a los ancianos, extranjeros y hombres de otras razas?


    7) ¿He mantenido la verdad y la fidelidad o he perjudicado a alguien con palabras falsas, con calumnias, mentiras o violación de algún secreto?


    8) ¿En mi estudio o trabajo soy justo, laborioso, honesto?


    9) ¿He sido impuro en mis pensamientos, deseos o conversaciones? ¿He cometido actos impuros solo? ¿He mantenido relaciones sexuales? En ese caso ¿he utilizado anticonceptivos abortivos -píldora del día después, DIU…-? ¿He cometido, facilitado o incitado al aborto?


    10) ¿He mantenido conversaciones, realizado lecturas o asistido a espectáculos y diversiones contrarias a la honestidad humana y cristiana? ¿He incitado al pecado a otros con mi forma de hablar, de vestir, de actuar, etc.?


    11) ¿He actuado alguna vez contra mi conciencia, por temor o por hipocresía?

  • Examen para matrimonios

    1) ¿Procuro amar a Dios sobre todas las cosas?¿Rezo todos los días en familia o me callo por vergüenza?


    2) ¿He faltado a Misa en domingo o día de fiesta?¿he hecho que mis hijos falten a Misa por mi culpa?


    3) ¿Obedezco, cuido y honro a mis padres según mi edad y sus necesidades?


    4) ¿Doy tiempo a la familia para cenar juntos, diversiones... o estoy siendo egoísta con mis ratos de descanso?


    5) ¿Protejo mi casa y los míos de las malas influencias del ambiente?


    6) ¿He manipulado con mis estados de ánimo y enfados para que se haga lo que quiero?


    7) ¿Doy más importancia al trabajo, amigos o aficiones u otras personas que a mi propio matrimonio?


    8) ¿Honro y respeto a mi esposo/a en todo momento?¿he compartido con mi esposo/a mis preocupaciones y alegrías?¿le escucho con interés?


    9) ¿Procuro educar cristianamente a mis hijos: enseñándoles la doctrina cristiana, dándoles ejemplo de buenas costumbres, corrigiéndolos y castigándolos cuando lo merecen?


    10) ¿He maltratado a mi esposo/a de palabra o de obra?¿Le he guardado la fidelidad que prometí ante el altar?


    11) ¿He procurado conservar la paz y buena armonía en familia, aun cediendo de mi derecho?¿He desautorizado d a tu esposo/a delante de los hijos?


    12) ¿Le he desobedecido en cosa grave?¿He dejando que los enfados se interpongan entre nosotros sin hablarnos, faltando al respeto, haciendo otros planes?


    13) ¿Soy austero en mis gastos personales sabiendo que mi dinero es de la familia? ¿Comparto todo lo que gano con mi esposo/a?


    14) ¿He aceptado pensamientos o miradas impuras?¿He realizado actos impuros solo o con otras personas?¿He faltado a la castidad en el matrimonio?¿He utilizado anticonceptivos y especialmente métodos abortivos (DIU, píldora del día después)? ¿Trato de conocer, aceptar y vivir conforme a la doctrina de la Iglesia en esta materia?


    15) ¿He mentido con perjuicio grave para el prójimo?¿He juzgado mal del prójimo sin suficiente motivo?¿He difamado o ridiculizado al prójimo?


    16) ¿He procurado que mi esposo/a se acerquen al sacramento de la Confesión? ¿Rezo por él/ella sabiendo que acercarle a Dios es el mayor acto de amor? 


    17) ¿Soy honesto y sincero en mi matrimonio o consiento pensamientos o deseos impuros?


    18) ¿He consentido la envidia mala o me comparo innecesariamente sin amar lo que tengo?

  • Examen para adultos

    • ¿He dudado o negado las verdades de la fe católica? ¿He practicado la superstición o el espiritismo?¿Me he acercado indignamente a recibir algún sacramento?


    • ¿He blasfemado? ¿He jurado sin necesidad o sin verdad?


    • ¿Hago con desgana las cosas que se refieren a Dios? ¿He faltado a Misa los domingos o días festivos? ¿He cumplido los días de ayuno y abstinencia?¿He callado en la confesión por vergüenza algún pecado mortal?


    • ¿Manifiesto respeto y cariño a mis padres y familiares?¿Soy amable con los extraños y me falta esa amabilidad en la vida de familia?


    • ¿He dado mal ejemplo a las personas que me rodean? ¿Les corrijo con cólera o injustamente?¿Me he preocupado de la formación religiosa y moral de las personas que viven en mi casa o que dependen de mí?¿Me quejo en casa?


    • ¿Evito que las diferencias políticas o profesionales degeneren en indisposición, malquerencia u odio hacia las personas?¿He hecho daño a otros de palabra o de obra?


    • ¿Guardo odio o rencor contra alguien? ¿Hay alguien a quien no d haya perdonado o desee mal?


    • ¿He descubierto, sin causa justa, defectos graves de otras personas?¿He hablado o pensado mal de otros? ¿He calumniado?


    • ¿He aceptado pensamientos o miradas impuras?¿He realizado actos impuros solo o con otras personas, dentro o fuera del matrimonio?¿Utilizo anticonceptivos y especialmente métodos abortivos (DIU, píldora del día después)? ¿Trato de conocer, aceptar y vivir conforme a la doctrina de la Iglesia en esta materia?


    • ¿He sido perezoso en el cumplimiento de mis deberes?


    • ¿He sido honesto en mi trabajo?¿He malgastado el dinero? ¿Doy limosna según mi posición?


    • ¿He dicho mentiras? ¿He reparado el daño que haya podido seguirse?


    • ¿Soy ejemplar en mi trabajo?¿Estoy dispuesto a sufrir una merma en mi reputación profesional antes de cometer o cooperar formalmente en una injusticia?


    • ¿Soy honesto y sincero en mi matrimonio? ¿Consiento pensamientos o deseos impuros?


    • ¿Me preocupo de influir -con naturalidad y sin respetos humanos- para hacer más cristiano el ambiente a mi alrededor?

  • Examen para abuelos

    Examínate si te ocurre alguna de estas cosas:!


    - si aceptamos la mediocridad en las cosas de Dios


    - si tenemos tendencia a criticar a la Iglesia


    - si contribuimos al desprestigio de las personas consagradas a Dios


    - si somos tacaños en la ayuda económica a la Iglesia


    - si llegamos habitualmente tarde a Misa


    - si hemos estado demasiado tiempo sin confesar


    - si descuidamos el ayuno y la abstinencia


    - si descuidamos la oración personal,


    - si no procuramos adquirir la debida formación religiosa


    - si damos por supuesto que el apostolado es cosa de los otros


    - si vivimos esquivando las cruces que nos santificarían


    - si somos negligentes en la atención debida al esposo o esposa


    - si somos negligentes en la educación de los hijos y de los nietos, quizá con el pretexto del mucho trabajo


    - si aumentamos innecesariamente la carga de los demás con caprichos y nuevas necesidades


    - si sólo nos preocupamos de que nuestros hijos nos complazcan, y rara vez les damos una alegría


    - si nos falta sentido del pudor


    - si estamos excesivamente seguros de las propias ideas


    - si nos sentimos como reyes no reconocidos o injustamente destronados, y, en consecuencia, siempre enfadados


    - si vivimos exageradamente inquietos por el porvenir


    - si no nos preocupa el sufrimiento ajeno ni las injusticias


    - si sólo somos amables cuando nos conviene


    - si carecemos del “sentido del otro",


    - si pactamos fácilmente con la injusticia


    - si siempre lo vemos todo desde el punto de vista propio


    - si solemos pasar factura a los demás, por lo que hacemos o nos parece hacer por ellos


    - si no damos limosna ni por casualidad


    - si exigimos mucho y damos poco


    - si tenemos tendencia a confiar más en nosotros mismos que en la gracia

EXAMEN AVANZADO PARA CRECER EN EL AMOR

Aquí tienes este examen de conciencia avanzado. Para ti que vas avanzando en el camino de la fe, para ti que quieres avanzar en el conocimiento propio y en el amor a Jesucristo. Pide luz al Espíritu Santo y luego léelo despacio, sin precipitación, sin miedo a descubrir oscuridad en ti porque Él “no ha venido a llamar a los justos sino a los pecadores” (Lc 5, 32). La plantilla es el himno al Amor de San Pablo, es Su Amor, no el nuestro. No te asustes si ves tantas diferencias. Él irá transformando nuestro corazón para que tengamos “los mismos sentimientos de Cristo” (Flp 2, 5).

"...si no tengo amor no soy nada... El amor es paciente, el amor es servicial y no tiene envidia; el amor no presume, ni se engríe; el amor no es maleducado ni egoísta; el amor no se irrita; ni lleva cuentas del mal, el amor no se alegra con la injusticia, sino que goza con la verdad. El amor disculpa sin límites, cree sin límites, espera sin límites, aguanta sin límites. El amor no pasa nunca” (1 Cor 13)

  • El amor es paciente...

    Perdón Señor, por mis impaciencias Contigo, por mis rebeldías contra tu Voluntad. Mis impaciencias con los hombres, mis impaciencias en la adversidad, mi rechazo sistemático del dolor, del sufrimiento, de la incomodidad. Perdón por las veces que no sé esperar tu gracia, por las veces que no sé adaptarme a los tiempos de los demás.

  • Es servicial...

    Perdón Señor por no entender la vida como servicio a ti en los hermanos. Por no poner mis talentos y mis recursos a disposición de los demás, por mi tacañería en dar mi tiempo, mi cariño, mis potencialidades. Por mi pereza, mi inactividad, mi falta de compromiso. Por negarme a desempeñar trabajos que me humillan, por no ser capaz de servir pasando desapercibido, por “pasar factura” a los demás cuando sirvo. Perdón por tantos pecados de omisión, por mi falta de identificación con las necesidades de los marginados, con los que sufren en el cuerpo y en el espíritu.

  • No tiene envidia...

    Perdón Señor, por mi envidia, por consentir ese cáncer de mi corazón. Perdón porque desconfío de ti y creo que me quieres menos que aquellos con quienes me comparo porque son más o tienen más. Perdón porque incluso me empeño en ser más que los otros, en quedar mejor, en ser más estimado, y me duele cuando otros quedan por delante de mí.

  • No presume...

    Perdón Señor por mi vanidad, mi presunción, mi vida de apariencias. Por esos gestos para demostrar mi propia bondad, por esas actitudes de falsa humildad en la que busco arrancar halagos de los otros. Perdón por estar tan pendiente de cómo he quedado, de qué piensan los


    demás de mí. Perdón por las veces que hago cosas buenas y no te doy a ti el mérito, y me quedo la gloria para mí en vez de darte gloria a ti que eres el único bueno.

  • No es maleducado...

    Perdón Señor, por mi falta de moderación, de sobriedad, de austeridad. Por mis excesos y despilfarros. Por las bromas soeces, los comentarios frívolos y por mis faltas de pudor. Perdón por mi chabacanería, mis faltas de atención a los demás y mis groserías

  • No se engríe...

    Perdón Señor, por mi soberbia, el culto a mí mismo, mi falta de humildad ante los hombres, incluso ante ti. Perdón porque me creo algo, por constituirme el centro de mi mundo, por tener en mí y no en ti el centro de mi gravedad. Por las broncas que no nacen del amor, sino del orgullo herido. Perdón porque tardo en pedir perdón y en perdonar. Perdón porque me siento salvado en vez de necesitado de tu perdón y tu misericordia y por no sentirme deudor ante los hombres y ante ti.

  • No es egoísta...

    Perdón Señor, por vivir para mí mismo sin preocupación por los demás. Por buscarme a mí en todo y centrarme en mis intereses, mi dinero, mi éxito, mi placer, mi comodidad. Perdón por vivir la sexualidad de manera egoísta, por utilizar a los demás como objetos de placer con la pornografía, por el egoísmo de la masturbación, por ir a lo mío incluso en la intimidad con mi esposo/a.

  • No se irrita...

    Perdón Señor, por mi falta de mansedumbre. Perdón por los gestos bruscos, las miradas duras, las palabras altisonantes, por mis enfados, mis ataques de ira, mi falta de dominio y control, mis indignaciones, mis incomprensiones, mis salidas de tono.

  • No lleva cuentas del mal...

    Perdón Señor, porque todo lo anterior nace de mi interior. De esa insistencia en fijarme en lo malo, por enfangarme en el mal de los demás y, además, decirlo. Perdón por las críticas, las calumnias, la exageración del mal ajeno, la propensión a ver solo lo malo en los demás, por juzgar severamente y condenar al hermano, por malinterpretar sus intenciones.

  • No se alegra con la injusticia...

    Perdón Señor por mi connivencia con el mal, por ceder cuando me conviene aunque sea malo, por transigir por interés o comodidad. Por mis pecados contra la injusticia. Por no dar a cada uno lo suyo. Por mi falta de respeto a lo ajeno. Por esas trampas que tú y yo sabemos... Por mi falta del cumplimiento del deber y por el poco aprovechamiento con todo lo que tengo.

Share by: